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CH. 12 Transformations in Europe 1. Introducción En 1455, el trabajador metalúrgico alemán, Johannes Gutenberg, desencadenó una revolución de las ideas. Con una imprenta, publicó el primer libro impreso en Europa: la Biblia de Gutenberg. Anteriormente, los libros en Europa se copiaban a mano, trabajo laborioso que los hacía costosos y relativamente escasos. Después de Gutenberg, se hizo posible producir libros en grandes cantidades y a bajo costo. La imprenta trajo cambios radicales a Europa, y más tarde a todo el mundo. Gutenberg no inventó el proceso de impresión. Ya en el año 700 E.C., los chinos estaban usando bloques de madera tallados para imprimir libros en papel. De allí la tecnología se extendió a Corea, Japón y el mundo musulmán. Más tarde los chinos inventaron el tipo móvil, usando un bloque de arcilla para cada carácter, pero este proceso no resultaba eficiente dados los miles de caracteres en la escritura china. Los coreanos produjeron un tipo móvil metálico en el siglo 13, pero tuvieron problemas similares a los chinos. La innovación de Gutenberg fue hacer un tipo metálico duradero para el alfabeto europeo que era mucho más reducido, y combinarlo con un proceso de impresión eficaz que él mismo diseñó. La combinación fue brillante. La prensa de Gutenberg causó una explosión en la publicación de libros. Para el año 1500, centenares de casas impresoras en toda Europa habían producido unos 30,000 títulos unos 20 millones de libros en total en más de una docena de idiomas. Esta revolución de la imprenta contribuyó a difundir ideas y conocimientos por Europa. Promovió la lectura y la educación. También ayudó a energizar cuatro movimientos culturales e intelectuales importantes a comienzos de la Europa moderna: el Renacimiento, la Reforma, la Revolución Científica y la Ilustración. Temas Interacción cultural Con ayuda de la imprenta, se extendieron por Europa nuevas ideas y creencias religiosas. Artistas, científicos y pensadores publicaron sus conocimientos y sus estudios avanzados. Estructuras políticas Las condiciones políticas contribuyeron a generar movimientos culturales. Esos movimientos influyeron, a su vez, en las estructuras políticas. Estructuras económicas La riqueza y la prosperidad en Europa alimentaron el Renacimiento. Las ideas generadas durante la Revolución Científica y la Ilustración tuvieron efectos económicos importantes. Estructuras sociales Las ideas del Renacimiento, la Reforma y la Ilustración contribuyeron a transformar a la sociedad europea. 2. El Renacimiento En 1550, el artista italiano Giorgio Vasari escribió un libro titulado Las vidas de los artistas. En él, elogió en renacer de la cultura clásica griega y romana que ocurría en Italia en ese momento. Vasari contrastó este florecimiento cultural con la “oscuridad” de la Edad Media después de la caída de Roma. Más tarde, los historiadores se referirían a esta era de reactivación cultural como el Renacimiento, o sea algo que “vuelve a nacer”. Raíces del Renacimiento Los historiadores generalmente dan como fechas del Renacimiento el período de 1300 a 1600. En realidad, el Renacimiento no comenzó ni terminó en cierta fecha. Tampoco representó un rompimiento claro con el pasado. Muchos de los cambios que ocurrieron durante este período tuvieron sus raíces en la última parte de la Edad Media. Ya para el año 1300, Europa estaba saliendo de la edad feudal. El intercambio y el comercio crecientes estaban generando nueva riqueza, prosperidad y crecimiento urbano. En París, Oxford y otras ciudades habían aparecido universidades comocentros de estudios superiores. Las monarquías nacionales y las ciudades-estado adquirían más poder. La Iglesia Católica seguía siendo una fuerza predominante, pero estaba perdiendo algo de su control sobre la vida cultural y política.

CH. 12 Transformations in Europe · muchas cosas. Fue pintor, escultor, arquitecto e ingeniero. Su obra más conocida es quizá la pintura de la Mona Lisa, que muestra una mujer de

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CH. 12 Transformations in Europe

1. Introducción En 1455, el trabajador metalúrgico alemán, Johannes Gutenberg, desencadenó una revolución de las ideas. Con una imprenta, publicó el primer libro impreso en Europa: la Biblia de Gutenberg. Anteriormente, los libros en Europa se copiaban a mano, trabajo laborioso que los hacía costosos y relativamente escasos. Después de Gutenberg, se hizo posible producir libros en grandes cantidades y a bajo costo. La imprenta trajo cambios radicales a Europa, y más tarde a todo el mundo.

Gutenberg no inventó el proceso de impresión. Ya en el año 700 E.C., los chinos estaban usando bloques de madera tallados para imprimir libros en papel. De allí la tecnología se extendió a Corea, Japón y el mundo musulmán. Más tarde los chinos inventaron el tipo móvil, usando un bloque de arcilla para cada carácter, pero este proceso no resultaba eficiente dados los miles de caracteres en la escritura china. Los coreanos produjeron un tipo móvil metálico en el siglo 13, pero tuvieron problemas similares a los chinos. La innovación de Gutenberg fue hacer un tipo metálico duradero para el alfabeto europeo que era mucho más reducido, y combinarlo con un proceso de impresión eficaz que él mismo diseñó. La combinación fue brillante.

La prensa de Gutenberg causó una explosión en la publicación de libros. Para el año 1500, centenares de casas impresoras en toda Europa habían producido unos 30,000 títulos —unos 20 millones de libros en total— en más de una docena de idiomas. Esta revolución de la imprenta contribuyó a difundir ideas y conocimientos por Europa. Promovió la lectura y la educación. También ayudó a energizar cuatro movimientos culturales e intelectuales importantes a comienzos de la Europa moderna: el Renacimiento, la Reforma, la Revolución Científica y la Ilustración.

Temas Interacción cultural Con ayuda de la imprenta, se extendieron por Europa nuevas ideas y creencias religiosas. Artistas, científicos y pensadores publicaron sus conocimientos y sus estudios avanzados. Estructuras políticas Las condiciones políticas contribuyeron a generar movimientos culturales. Esos movimientos influyeron, a su vez, en las estructuras políticas. Estructuras económicas La riqueza y la prosperidad en Europa alimentaron el Renacimiento. Las ideas generadas durante la Revolución Científica y la Ilustración tuvieron efectos económicos importantes. Estructuras sociales Las ideas del Renacimiento, la Reforma y la Ilustración contribuyeron a transformar a la sociedad europea.

2. El Renacimiento En 1550, el artista italiano Giorgio Vasari escribió un libro titulado Las vidas de los artistas. En él, elogió en renacer de la cultura clásica griega y romana que ocurría en Italia en ese momento. Vasari contrastó este florecimiento cultural con la “oscuridad” de la Edad Media después de la caída de Roma. Más tarde, los historiadores se referirían a esta era de reactivación cultural como el Renacimiento, o sea algo que “vuelve a nacer”. Raíces del Renacimiento Los historiadores generalmente dan como fechas del Renacimiento el período de 1300 a 1600. En realidad, el Renacimiento no comenzó ni terminó en cierta fecha. Tampoco representó un rompimiento claro con el pasado. Muchos de los cambios que ocurrieron durante este período tuvieron sus raíces en la última parte de la Edad Media. Ya para el año 1300, Europa estaba saliendo de la edad feudal. El intercambio y el comercio crecientes estaban generando nueva riqueza, prosperidad y crecimiento urbano. En París, Oxford y otras ciudades habían aparecido universidades comocentros de estudios superiores. Las monarquías nacionales y las ciudades-estado adquirían más poder. La Iglesia Católica seguía siendo una fuerza predominante, pero estaba perdiendo algo de su control sobre la vida cultural y política.

Durante el siglo XIV, las guerras y la peste bubónica —la Muerte Negra—causaron grandes perturbaciones en Europa. Estos sucesos asolaron regiones y poblaciones enteras y redujeron la fuerza laboral; pero también ayudaron a destruir el feudalismo y abrir nuevas posibilidades de cambio. Uno de esos cambios fue el desarrollo de talleres urbanos donde se utilizaban nuevos aparatos para ahorrar trabajo. Los artesanos calificados que trabajaban en estas pequeñas industrias producían una amplia variedad de bienes de lujo y maquinarias. De esta clase artesana salieron muchos de los artesanos, artistas, arquitectos y otros individuos creativos que impulsaron el Renacimiento. Origines italianos El Renacimiento comenzó en Italia, donde las condiciones eran ideales para un resurgimiento cultural. En 1300, buena parte de Italia estaba controlada por ciudades-estado como Roma, Venecia, Florencia y Milán. Estas ciudades-estado se habían enriquecido gracias al comercio.Los prósperos mercaderes y banqueros italianos tenían dinero para gastar en lujos y obras de arte. Los gobernantes de las ciudades-estado competían con sus rivales dándole a su ciudad gloria artística. Los mecenas ricos (personas que patrocinaban las artes), como la familia Medici (Mé-di-chi) que gobernaba a Florencia, ofrecían apoyo económico a los escritores y artistas. Se empezó a dar más importancia a la educación, pues los negocios y el gobierno exigían más personas capaz de leer y escribir y versadas en contabilidad y leyes. También hubo otros factores. Italia llevaba muchos años de

intercambio comercial internacional con el mundo al otro lado del Mediterráneo. Gracias a este contacto extranjero, los italianos eran más conscientes del mundo. El pueblo italiano, además, estaba rodeado de los restos de Roma clásica.Esta herencia estimuló su interés por el pasado, y ese interés se reforzó gracias a los contactos con el Imperio Bizantino, donde se preservaba mucha sabiduría clásica. Durante los siglos 14y 15, muchos eruditos bizantinos se mudaron a Italia para escapar de la creciente amenaza del Imperio Otomano. Trajeron consigo un gran caudal de conocimientos.

Aunque los pensadores del Renacimiento querían revivir la cultura clásica, la realidad es que esa cultura nunca desapareció del todo en Europa. La Iglesia Católica había preservado las obras de Platón, Aristóteles y otros filósofos antiguos, pero interpretaba sus ideas desde una perspectiva cristiana. Lo que hicieron los pensadores renacentistas fue volver a las obras originales y leerlas con una mentalidad nueva y menos religiosa. Al revivir el pensamiento clásico, los artistas y escritores del Renacimiento se guiaban por el humanismo. Esta filosofía equilibraba la fe religiosa con un punto de vista secular. Hacía énfasis en la dignidad y valor del individuo. Como humanistas, los pensadores del Renacimiento estudiaban el arte y la literatura clásicos para ver su perspectiva sobre la vida humana, más que sobre asuntos espirituales.

Los escritores del Renacimiento El primer gran escritor del Renacimiento Italiano fue Dante Alighieri (a-li-guié-ri). Su máxima obra, La Divina Comedia, es un poema épico que describe el viaje imaginario del autor por la vida del más allá. Dante fue el primer autor bien conocido que escribió tanto en latín clásico como en el lenguaje vernáculo, o nativo. Promovió el empleo del idioma italiano para poner los conocimientos al alcance de más personas. Dos grandes humanistas siguieron los pasos de Dante: Francesco Petrarca, conocido simplemente como Petrarca, escribió poesía lírica, también en italiano.Escudriñó las bibliotecas de Europa buscando obras clásicas y las hizo conocer. Otro gran escritor fue Giovanni Boccaccio (bo-cá-cho). Su obra más famosa, El Decamerón, narra la historia de diez jóvenes que huyen de Florencia para escapar de la peste. Durante su ausencia, cuentan cuentos para pasar el tiempo. El libro llamó la atención de muchos lectores italianos, aunque a la iglesia le disgust[o su mentalidad liberal respecto de la generación joven.

Otro escritor, Nicolás Maquiavelo (en italiano, Niccolò Machiavelli: ma-quia-vé-li), escribía libros con temas políticos. Su obra más conocida, El Príncipe, ofrecía consejos muy prácticos para los gobernantes. Por ejemplo, decía que el gobernante siempre debe estar preparado para la guerra. “Una vez que los príncipes piensan más en el placer personal que en las armas”, escribió, “han perdido su dominio”. También dijo que es más importante para un gobernante ser temido que amado.Aunque los consejos de Maquiavelo parecen duros para un humanista del Renacimiento, su mentalidad humanista estaba de acuerdo con el espíritu secular del momento.

Arte del Renacimiento El Renacimiento italiano dio una producción extraordinaria de arte. Los pintores renacentistas dominaban el arte de la perspectiva, que daba profundidad visual a sus obras. Los escultores que trabajaban en piedra revivieron el realismo de la escultura clásica griega.Tres de los artistas italianos más grandes fueron Leonardo da Vinci (vín-chi), Miguel Ángel y Rafael. Leonardo fue un verdadero “hombre del Renacimiento”, una persona hábil para muchas cosas. Fue pintor, escultor, arquitecto e ingeniero. Su obra más conocida es quizá la pintura de la Mona Lisa, que muestra una mujer de sonrisa misteriosa. También hizo miles de dibujos de la anatomía humana, de plantas y animales, de aparatos mecánicos y armas. Incluso diseñó una máquina voladora siglos antes del invento del avión. Miguel Ángel fue un artista brillante que representó el cuerpo humano con un grado de detalle asombroso. Su obra maestra es la pintura en el techo de la Capilla Sixtina en Roma, que muestra escenas de la Biblia. Sus esculturas en piedra La Piedad y el David también sobresalen por su realismo.

Rafael hacía énfasis en el equilibrio y la composición en sus obras. Una de sus pinturas más importante, la Escuela de Atenas, muestra filósofos de Grecia antigua al lado de artistas y pensadores del Renacimiento. Refleja la devoción humanista por los ideales clásicos. El Renacimiento en el norte Para mediados del siglo XV, el Renacimiento se estaba extendiendo a otras partes de Europa, especialmente al norte. Ciudades de Alemania, Francia, Gran Bretaña, Holanda y Flandes (hoy Bélgica) comenzaban a crecer y prosperar tras décadas de enfermedades y guerra. Estas ciudades se convirtieron en suelo fértil para las ideas del Renacimiento, que se difundían gracias al nuevo medio de la imprenta. Los escritores y artistas del norte también viajaban a Italia para estudiar y los italianos viajaban al norte. Como resultado, el arte y el humanismo renacentista se afirmaron en el norte de Europa también. Los humanistas del norte conservaron su fe cristiana, pero también escribieron obras que criticaban a la iglesia y la sociedad. El más grande de los humanistas cristianos fue el escritor holandés Desiderio Erasmo. En su obra más famosa, Elogio de la locura, escrita en 1509, criticó la corrupción y los abusos en la Iglesia Católica. Unos años después, en 1516, el inglés. Tomás Moro (Sir Thomas More en inglés) publicó su famoso libro Utopía. Esta obra visionaria describe una sociedad ideal regida no por el poder de reyes o papas, sino por la razón; una sociedad donde toda la propiedad es compartida y donde todos tienen igualdad de derechos.

El más grande escritor del Renacimiento en el norte fue William Shakespeare, que vivió de 1564 a 1616. Los temas de la cultura clásica y el humanismo son obvios en muchas de sus obras de teatro, entre ellas Julio César. El interés de Shakespeare por la costumbres del mundo y su amor por el inglés vernáculo hacen de él un verdadero hombre del Renacimiento. Algunos grandes artistas del período fueron Alberto Durero (en alemán Albrecht Dürer: dyú-rer), Jan van Eyck (yan van áik) y Pieter Bruegel (Brói-guel). Durero fue un artista alemán que estudió en Italia y dominó el uso de la perspectiva. Van Eyck y Bruegel fueron pintores flamencos. Van Eyck avanzó la técnica flamenca de la pintura al óleo, que daba a su obra una cualidad luminosa. Bruegel es famoso por sus escenas de la vida campesina flamenca.

El Renacimiento y la religión A veces, los valores expresados en el art y la literatura renacentista provocaban tensiones con la Iglesia Católica. La iglesia siempre se consideró como el guardián y el intérprete del saber y la cultura. Ahora la filosofía secular del humanismo desafiaba esa posición, avanzando la idea clásica de que “el hombre es la medida de todas las cosas”. La filosofía humanista sugería que los individuos podían comprender el mundo por su cuenta y que podían incluso cuestionar las enseñanzas de la iglesia. Sugería que el individuo tenía libertad para tomar sus propias decisiones morales y éticas. Estas ideas socavaban la autoridad de la iglesia.

Sin embargo, la mayoría de los pensadores del Renacimiento siguieron siendo fieles cristianos. Aunque acogieran el humanismo y criticaran las prácticas de la iglesia, no cuestionaban los principios básicos de la religión cristiana. Incluso, pensadores humanistas como Erasmo promovían la búsqueda de una experiencia religiosa más profunda. Esta búsqueda de una fe con más sentido llevaría a una transformación grande del cristianismo en el siglo 16.

3. La Reforma Protestante En octubre de 1517, un erudito católico en Alemania llamado Martín Lutero (Martin Luther en alemán) dirigió una carta al arzobispo de Maguncia (Mainz en alemán). En la carta, criticaba la corrupción en la iglesia y pedía reformas. Las ideas de Lutero se difundieron en panfletos impresos y pronto desataron una revuelta religiosa. Muchos de los que protestaban se salieron de la Iglesia Católica y formaron nuevos movimientos religiosos cristianos. Esto se llegó a conocer como la Reforma Protestante. Problemas en la iglesia Durante siglos, la Iglesia Católica había contado con la lealtad y la fe de la mayoría de los europeos. Pero con el tiempo, habían surgido problemas en la iglesia. Aunque los sacerdotes hacían voto de pobreza, el papa y otros altos funcionarios

vivían con lujo y riqueza. Algunos clérigos católicos tenían esposa e hijos pese a sus votos de celibato. Muchos sacerdotes locales tenían poca educación. Muchos eran analfabetos y escasamente comprendían la Biblia. La iglesia también había caído en prácticas corruptas, entre ellas la venta de cargos en la iglesia y el cobro por servicios religiosos. Llegó hasta el punto de vender perdones, llamados indulgencias, que salvaban de castigo a los pecadores. Los críticos ya habían llamado la atención sobre estos problemas. Hacia finales del siglo 14, un profesor de Oxford llamado John Wycliffe había criticado la riqueza y la inmoralidad de los funcionarios de la iglesia. Otro crítico, el predicador checo Jan Hus, pidió fin a la corrupción. En 1415, Hus fue quemado en una hoguera por herejía. Por otra parte, algunos humanistas cristianos como Erasmo y Tomás Moro se habían burlado de las supersticiones y las falsas doctrinas enseñadas por la iglesia. Martín Lutero también expresó estas inquietudes, pero su intención no era comenzar una revuelta. Lo que pretendía era estimular un debate dentro de la iglesia. Su queja inicial fue por la venta de indulgencias, pero su verdadero propósito era devolverle la su iglesia su pureza. Pensaba que ritos como la confesión y las plegarias a los santos no traían la salvación, como decía la iglesia. Sostenía que la salvación venía solamente por la fe y que la única fuente de la verdad religiosa era la Biblia.“Una cosa, y solamente una, es necesaria para la vida cristiana”, escribió. “Es única cosa es la santa Palabra de Dios”. Lutero argumentaba que los creyentes no necesitaban sacerdotes que les mostraran la verdad. Decía que cualquier cristiano podía leer la Biblia y entender el mensaje de Dios.

Una revolución protestante Las ideas de Lutero no cayeron bien a los dirigentes de la iglesia. Las consideraban herejía y una amenaza a la autoridad de la iglesia. En 1520, el papa León X exigió que Lutero se retractara de sus enseñanzas o sufriera la pena de excomunión. Lutero se negó y lo expulsaron de la iglesia. Pronto tuvo que ocultarse para evitar el castigo. Sin embargo, siguió escribiendo y publicando su obra, que se imprimía y circulaba por toda Europa. Lutero y sus seguidores formaron la Iglesia Luterana, una rama nueva del cristianismo. Los ministros luteranos simplificaron los servicios y ritos religiosos y predicaban el alemán en vez de latín. Muchos alemanes abandonaron el catolicismo en favor de la nueva fe luterana. En esa época, Alemania formaba parte del Sacro Imperio Romano, un estado que también incluía partes de Francia, Italia y Europa Central. Sin embargo, los territorios

alemanes tenían un grado considerable de autonomía en su gobierno. Algunos de sus príncipes desafiaron a Carlos V y se unieron al bando de Lutero. Llegaron a conocerse como protestantes por sus protestas contra la Iglesia Católica. Mientras tanto, surgieron otros grupos protestantes en diferentes partes de Europa Suiza fue un centro importante de actividad reformista. En Zurich, Huldrych Zwingli (júl-dric zvíng-li), sacerdote católico inspirado por las ideas de Lutero, fundó una nueva sectareligiosa. Su Iglesia Reformada hacía énfasis en el estudio de la Biblia y prohibía todas las imágenes y la música en los servicios religiosos.

En Ginebra, el reformista Juan Calvino fundó una secta aún más estricta. El calvinismo resaltaba los principios del ahorro, el trabajo esforzado y el rechazo a los placeres del mundo. Los miembros que no cumplían estos principios eran excomulgados. Calvino también resaltaba el concepto de la predestinación. Esta es la idea de que unas personas son elegidas por Dios para la salvación. La iglesia de Calvino consiguió adeptos en toda Europa: en Francia, Holanda, Alemania e Inglaterra.Más tarde, sus ideas tuvieron un impacto grande en la religión de los colonos británicos en Norteamérica. También Inglaterra tuvo su reforma. En 1534, el rey Enrique VIII formó la Iglesia de Inglaterra, llamada también la Iglesia Anglicana. Enrique rompió con la Iglesia Católica porque esta se negó a darle el divorcio pero también porque él quería controlar el poder de la iglesia (y sus riquezas) en Inglaterra. La difusión de la religión protestante generó conflictos en toda Europa. En Alemania, los estados protestantes y católicos emprendieron una serie de guerras a muerte que duraron un siglo, hasta mediados del siglo 17. Francia, Holanda y otros países también sufrieron guerras religiosas. Solamente Italia, España y Portugal quedaron al margen de la influencia protestante. Finalmente, se impuso la costumbre de que el gobernante de cada estado elegía la religión de su pueblo. Esto produjo migraciones de muchos creyentes a tierras más hospitalarias.

La respuesta Católica Como respuesta a los retos de la Reforma Protestante, la Iglesia Católica inició su propia campaña de reforma y renovación. Este movimiento se conoce como la Contrarreforma. La iglesia tomó varias medidas en defensa del catolicismo. En 1545, dio comienzo a una serie de reuniones conocidas como el Concilio de Trento. Este concilio definió la doctrina católica y pidió reformas necesarias. Una reforma fue poner fin a la venta de indulgencias. Otra fue mejorar la educación de los sacerdotes. El concilio también impuso una disciplina más rígida sobre los católicos, haciendo obligatoria la asistencia a la misa y prohibiendo ciertos libros. Estos cambios, y otros, ayudaron a establecer más orden y unidad en la iglesia. La iglesia también quiso aumentar sus miembros renovando la actividad misionera y empleando un estilo de culto más personal. Fundó una nueva orden religiosa, los Jesuitas, para hacer conversos católicos en Europa y el exterior. También construyó lujosas iglesias nuevas, repletas de obras de arte magníficas, para inspirar a los fieles. Este estilo espléndido apelaba a las emociones. Ofrecía un claro contraste con el carácter sencillo y severo de la religión protestante.

La Contrarreforma dio nuevo ánimo a la Iglesia Católica. Sin embargo, ya para el siglo 17la Reforma Protestante había alterado la faz de Europa. El continente ya no estaba unido alrededor de la religión católica. Los gobernantes se declaraban más libres de la autoridad religiosa. Además, los europeos eran más leídos e instruidos, gracias al énfasis protestante en el estudio de la Biblia y a los efectos de la imprenta. Aunque Europa mantenía un alto grado de religiosidad, estos cambios fomentaron tendencias seculares dentro de la sociedad europea.

4. La Revolución Científica Los cambios que se produjeron en la sociedad europea durante el Renacimiento y la Reforma Protestante también promovieron nuevas maneras de ver el mundo natural. A partir del siglo 17, los científicos (que entonces se llamaban filósofos naturalistas) aplicaban su poder de razonamiento y observación para comprender las leyes de la naturaleza. Este movimiento se llegó a conocer como la Revolución Científica. Iba a transformar la vida en Europa y, con el tiempo, en el mundo. Los Orígenes de la Ciencia Moderna Antes de 1500, la mayoría de los europeos acudían a dos fuentes de conocimiento sobre el mundo natural. Una era la Biblia y las enseñanzas religiosas. La otra era la obra de los filósofos clásicos como Aristóteles. Ahora, el Renacimiento y la Reforma Protestante socavaron la autoridad tradicional y promovieron el razonamiento independiente. La gente comenzó a mirar más allá de la religión y de los clásicos en busca de respuestas a sus preguntas sobre la naturaleza y el universo. Este espíritu de cuestionamiento promovió el crecimiento de la ciencia.

También hubo otros factores. Las universidades ofrecían a los eruditos la oportunidad de estudiar ciencias y matemáticas. El comercio y la exploración en otras regiones del mundo trajeron nuevos conocimientos desde China, la India y el mundo árabe. El descubrimiento de América puso fin a los antiguos conceptos de la geografía del mundo y expuso a los europeos a nuevas gentes, plantas y animales. Los viajes marítimos también despertaron interés por la astronomía, la navegación y la cartografía. Los estados europeos dieron cada vez más apoyo a la investigación y la tecnología en estos campos. Todos estos avances estuvieron respaldados por la imprenta, que ayudaba a difundir información y a promover la adquisición de nuevos conocimientos. La Revolución Científica no ocurrió de repente ni produjo transformaciones de la noche a la mañana.Fue un proceso gradual con sus raíces en la Edad Media y el Renacimiento. Su verdadero auge comenzó entre mediados del siglo XVI y finales del siglo XVIII. En muchos aspectos, esa revolución todavía continúa hoy. La Comprensión del universo Los primeros avances grandes en las ciencias se produjeron en el campo de la astronomía. Desde la época de Grecia antigua, la mayoría de las personas habían creído que el centro del universo era la Tierra. Este concepto se conoce como la teoría geocéntrica. Según Aristóteles, el Sol, los planetas y las estrellas giraban alrededor de la Tierra en órbitas circulares. El astrónomo griego Ptolomeo amplió este teoría en el segundo siglo E.C. La iglesia también apoyaba la idea de un universo centrado en la Tierra. En 1543, el astrónomo polaco Nicolás Copérnico ofreció una teoría diferente. Determinó que la Tierra y los demás planetas giran alrededor del Sol. Su teoría heliocéntrica daba una descripción más correcta del sistema solar, pero en su época pocos le prestaron atención. No obstante, otros científicos a comienzos del siglo 17se estaban basando en el trabajo de Copérnico. El astrónomo alemán Johannes Kepler empleó matemáticas para calcular los movimientos de los planetas. Así determinó que estos no recorrían órbitas circulares sino elípticas. El científico italiano Galileo Galilei observó el cielo directamente con un nuevo invento, el telescopio. Sus observaciones apoyaron la teoría heliocéntrica. En respuesta, la Iglesia Católica acusó a Galileo de herejía y lo obligó a retractarse. Sin embargo, sus ideas siguieron difundiéndose. El siguiente paso grande en la comprensión del universo vino del físico inglés Isaac Newton. En 1687, Newton publicó su obra Principia, o los Principios, libro en el cual explicaba las leyes de la gravedad y el movimiento. La obra de Newton tuvo repercusiones enormes. El universo se empezó a ver como una máquina bien diseñada, algo así como un reloj que funciona siguiendo principios mecánicos. Aunque el universo mecánico chocaba con las enseñanzas de la iglesia, la mayoría de los primeros científicos, entre ellos el propio Newton, no se oponían a la religión. Muchos, incluso, veían en las leyes de la naturaleza un ejemplo más del milagro de la creación. El método científico Un resultado clave dela Revolución Científica fue el desarrollo del método científico. Este método se basa en observar cuidadosamente y probar los datos. Forma la base de la investigación científica. El método comprende varios pasos. Empieza con un problema o pregunta basada en la observación. Luego el científico formula una hipótesis, o suposición, para responder a la pregunta. Prueba la hipótesis con un experimento y anota los resultados. Entonces el científico analiza los resultados para determinar si la hipótesis es correcta o no. Dos científicos influyeron de manera importante en el desarrollo del método científico. Uno fue René Descartes (de-cárt), un filósofo francés hábil en matemáticas y lógica. Descartes pensaba que se podía emplear el razonamiento humano para resolver problemas complejos. El otro personaje fue Francis Bacon, un inglés que resaltaba mucho el valor de la experimentación. Bacon pensaba, además, que la ciencia debía traer beneficios prácticos. “La finalidad acertada y legítima de las ciencias”, escribió, “es enriquecer la vida humana mediante nuevos descubrimientos y facultades”. Esta idea fomentaría el avance de la tecnología, con todos sus efectos económicos y ambientales.

Expansión de las ciencias Al proseguir la Revolución Científica, otros científicos hicieron descubrimientos importantes en diversos campos. En muchos casos, aprovecharon inventos nuevos, como el microscopio y el termómetro, que les ayudaban en sus descubrimientos. Algunos de los avances más importantes ocurrieron en los campos de la biología, la medicina y la química. El biólogo sueco Lineo (Carl Linnaeus en sueco) formuló un sistema para clasificar las plantas y los animales por su tipo científico. El médico inglés William Harvey descubrió cómo circula la sangre por el cuerpo. El químico francés Antoine Lavoisier explicó el proceso químico que produce fuego.

Estos científicos pioneros ayudaron a sentar las bases de las ciencias modernas. Su trabajo sirvió de base para otros avances científicos y nuevas tecnologías que acabarían por transformar al mundo. Al mismo tiempo, las ideas de la ciencia dieron origen a conceptos nuevos sobre la sociedad, basados en los principios de la razón y el progreso.

5. La Ilustración A mediados del siglo 17, los pensadores europeos comenzaron a aplicar principios científicos al estudio de la sociedad y el gobierno. Pensaban que la razón era la clave para el progreso humano y que el método científico serviría para resolver problemas de carácter social. Este movimiento intelectual, que alcanzó su punto culminante en el siglo XVIII, se llamó la Ilustración. Orígenes de las ideas de la Ilustración La Ilustración fue un fruto directo de la Revolución Científica. Los pensadores de la Ilustración se inspiraban en la ciencia y en el objetivo de comprender las leyes de la naturaleza. Consideraban que la sociedad humana también se regía por leyes naturales. Esperaban aprovechar el poder de la razón para comprender y mejorar la sociedad.Como resultado, este período también se llama la Edad de la Razón.

El Renacimiento y la Reforma Protestante también influyeron en la Ilustración. Los pensadores de la Ilustración adoptaron las ideas renacentistas del individualismo y el razonamiento secular. De la Reforma Protestante tomaron el hábito de cuestionar la autoridad.Veían con escepticismo las ideas recibidas e insistían en descubrir la verdad por sí mismos. Seguían el ejemplo de Descartes, quien escribió: “La primera regla fue que yo no aceptaría por verdadero nada que no conociera claramente como tal”. De Grecia y Roma clásicas, los pensadores de la Ilustración también recibieron la idea de que el pueblo debe tener una voz en su gobierno. Los que apoyaban esta idea se inspiraban en la democracia de Atenas antigua y en la república de Roma antigua.

Los pensadores de toda Europa acogieron los ideales de la Ilustración, especialmente en Gran Bretaña y Francia. Aunque estos pensadores tenían en común su devoción general por las ideas de la razón y el progreso, no estaban de acuerdo en todo. La Ilustración fue un movimiento diverso, con muchos puntos de vista.

La Ilustración en Gran Bretaña Los primeros grandes pensadores de la Ilustración fueron de Gran Bretaña. Dos de los más importantes fueron Thomas Hobbes y John Locke. Hobbes escribió su libro más importante, Leviatán, en 1651. Aquí presentó el argumento de que el ser humano es egoísta por naturaleza y que necesita gobernantes fuertes para mantener el orden. Creía que la mejor forma de gobierno era una monarquía absoluta. John Locke tenía ideas muy diferentes de las de Hobbes. Favorecía una monarquía constitucional, una forma de gobierno en que el poder del monarca está limitado por leyes. Locke argumentó que la base del gobierno era un contrato social en el cual el pueblo acepta que será gobernado y recibirá a cambio la protección de sus derechos naturales. Entre estos derechos se cuentan el derecho a la vida, a la libertad y a la propiedad. Si un gobierno no protegía los derechos naturales, dijo Locke, el pueblo tenía el derecho de derrocarlo. Las ideas de Locke influyeron grandemente en el pensamiento político, especialmente en Francia y en las colonias inglesas de Norteamérica.

Otra figura clave de la Ilustración en Gran Bretaña fue el filósofo escocés Adam Smith. Su libro La riqueza de las naciones sentó las bases de la economía moderna. Smith consideraba que un mercado libre basado en la competencia y el interés propio beneficiaría a la sociedad en general.Pero sostenía también que para tener éxito, un sistema económico tiene que ayudar a los pobres.Escribió: “Ninguna sociedad puede ciertamente ser floreciente y feliz, de la cual la mayor parte de los miembros sean pobres y desdichados.” Unos pensadores de la Ilustración trataron sobre los derechos de la mujer y los niños. Por ejemplo, en 1792 la autora inglesa Mary Wollstonecraft expresó las ideas feministas incipientes en su libro Reivindicación de los derechos de la mujer.

Los filósofos franceses En el siglo XVIII, el centro de la Ilustración pasó a Francia. En París, los philosophes (palabra francesa que indicaba los pensadores de la Ilustración) se reunían en hogares particulares para tertulias animadas, llamadas salones. Entre los philosophes más importantes se contaban el barón de Montesquieu, Voltaire y Jean-Jacques Rousseau (ru-só). Los tres tuvieron una influencia importante en los ideales fundacionales de los Estados Unidos. El libro más famoso de Montesquieu fue El espíritu de las leyes . En él, abogó por un sistema de gobierno en tres partes, con una separación de poderes entre las ramas ejecutiva, legislativa y judicial.

Voltaire, cuyo nombre verdadero era François-Marie Arouet, fue un escritor y pensador brillante que abogó por la tolerancia religiosa. Criticó la persecución religiosa y apoyó la libertad de palabra.

Rousseau consideraba que la sociedad corrompe al hombre y que este encuentra una vida más pura en armonía con la naturaleza. Sin embargo, también reconocía la necesidad de un gobierno y defendía un sistema político basado en la voluntad del pueblo. Escribió: “El pueblo, siendo sujeto a las leyes, debe ser el autor de las mismas; las condiciones de la sociedad deben estar regidas únicamente por quienes se juntan para formarla.”

El Impacto de la Ilustración La Ilustración tuvo varios efectos. Uno fue promover nuevos modos de pensar entre algunos líderes políticos. Monarcas como Catalina la Grande de Rusia acogieron las ideas reformistas en la educación y en el bienestar social. Llegaron a conocerse como monarcas ilustrados, si bien sus reformas las hacían a veces a medias. Un efecto más importante de la Ilustración fue que dio origen a nuevos ideales políticos. Las ideas de libertad, de los derechos naturales y del gobierno republicano se extendieron por toda Europa y las Américas. Impulsaron las revoluciones americana y francesa a finales del siglo 18 y contribuyeron a encender los movimientos independistas de la América Latina a comienzos del siglo 19.

La Ilustración promovió una fe optimista en el futuro. Los pensadores de la Ilustración creían que era posible comprender y mejorar la sociedad. Muchos creían que el progreso social y político era inevitable. Estas ideas persistieron en la era moderna. Este período también promovió la tendencia hacia actitudes seculares en la sociedad. Puso énfasis en la razón por encima de la religión en la busca de conocimientos. También promovió los principios de la tolerancia religiosa y respeto por el individuo. Estos también son principios que recibimos en herencia de la Ilustración.

Resumen En este capítulo, leíste acerca de cuatro movimientos importantes en Europa: el Renacimiento, la Reforma Protestante, la Revolución Científica y la Ilustración. Juntos, ayudaron a transformar la sociedad europea a comienzos de la era moderna. Interacción pultural Cada uno de estos movimientos difundió nuevas ideas y creencias. El Renacimiento revivió el saber clásico y promovió actitudes seculares. Surgieron nuevos estilos en el arte y la literatura. La Reforma planteó un reto a las creencias católicas y produjo nuevas religiones cristianas. La Revolución Científica empleó el poder de la razón para descubrir leyes naturales. Al hacerlo, alteró los conceptos sobre la naturaleza y el universo. La Ilustración aplicó los principios científicos al estudio de la sociedad. Promovió la creencia en el progreso humano. Estructuras políticas La política de las ciudades-estado en Italia contribuyó al origen del Renacimiento. La Reforma desató guerras religiosas y redujo el poder de la Iglesia Católica. La Ilustración promovió nuevos ideales políticos que encendieron la chispa de la reforma y la revolución en Europa y América. Estructuras económicas La prosperidad creciente sentó las bases económicas para el Renacimiento. Los métodos y descubrimientos de la Revolución Científica llevaron al desarrollo de la tecnología. Las ideas de la Ilustración dieron origen a la actual ciencia de la economía. Estructuras sociales El Renacimiento, la Reforma y la Ilustración tuvieron efectos sobre la sociedad europea. El énfasis en el valor del individuo y el pensamiento secular contribuyeron a deshacer las restricciones sociales. El desafío a la autoridad de la Iglesia Católica dio otra sacudida a la sociedad.