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La revista que te aleja del cielo. 1

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La revista que te aleja del cielo. 1

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2 La revista que te aleja del cielo.

Contenido

Cuando el cielo nos mira. 4

Poquito a poco. 15

Un domingo en la Central de Abastos. 10

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La revista que te aleja del cielo. 3

Editorial.Hell Magazine nace de la necesidad de crear espacios libres para cualquier manifestación artística. Sin poses, sin tabúes, libre de palabras vacias. Hell Magazine nace por el capricho insistente de hacer algo.

Hell Magazine no pretende generar un punto de referencia en el diseño mexicano o en las artes graficas, fue creada para mostrar trabajos interesantes, que no tienen lugar en medios formales deseosos de vender.

Hell Magazine espera tus trabajos.*

* Hell Magazine se reserva el derecho de publicar cualquier trabajo y no se hace

responsable de los trabajos publicados y respeta la autoría intelectual de todos sus

colaboradores.

De portada.Fotografía; Arturo Rogel.

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Hell Magazine, México D.F. edición bimestral independiente de distribución libre y gratuita,

a Hell Magazine le vale madres si te ofende su contenido pues es responsabilidad de

sus colaboradores. Hell Magazine y su logotipo es propiedad intelectual con derechos

reservados. Se prohíbe su reproducción parcial o total en otros medios sin consentimiento

de sus autores, las obras graficas contenidas son propiedad de sus realizadores, Hell

Magazine es un foro abierto a toda idea o trabajo.

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4 La revista que te aleja del cielo.

Fotografía; Arturo Rogel.

Al viajar por carreteras o al estar en la azotea de cualquier lugar es relativamente fácil el elevar la mirada del horizonte. Suena más sencillo de lo que es, hacerlo implica un acto completo de coordinación entre el cuerpo y la mente, simplemente por el hecho de querer hacerlo, pensar que no es difícil y sin que el cansancio o la falta de ganas no entorpezcan el acto.

Después de realizada la primera parte es necesario poder mirar un punto en el azul profundo del cielo, tarea nada fácil, si no se encuentra un punto en zenit es posible hacer un pequeño paneo, ya sea con el movimiento completo de la cabeza o solo con los ojos. Es recomendable girar en nuestro propio eje. Al hacer esto usted estará viendo el cielo. Busque algo de interés, quizá se sorprenda de lo que puede encontrar. Es más que un acto mecánico-corporal, pues implica en sí mismo una tarea de reflexión, pues además de querer hacerlo no siempre es fácil poder encontrar algo que ver en un azul grisáceo del cielo citadino o en un manto que no siempre es azul y no tiene nubes blancas.

Las siguientes fotografías son un acto reflejo y una regresión a la infancia primigenia, donde se podía contemplar el cielo sin descansar o mejor dicho descansando.

Cuando el cielo nos mira.

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Tomos analgésicos para soportar la próxima hora. Todo es acido y siniestro

Eder Santos

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6 La revista que te aleja del cielo.

Busqué en principiosbusqué en la nadaen lo sublime tu despertarel punto justo donde encontrarteen ese umbral de felicidad.

Noche de putasnoche de putas y cabaretnoche de putasnoche de putas y cabaret.

I am a bastard mani am a lucky manI wanna saty here all noght long

Fue un trencito, donde bailaronel cura, el yoda y un tal Mustafádonde tu estabasroja desnudamezclando vida y te digo másque no claudiquen tus pretensionesy que un día mami, no me cobres más.

Noche de putas(Fragmento) Karamelo Santo

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Viento negro, luna blanca...

Viento negro, luna blanca.Noche de Todos los Santos.Frío. Las campanas todasde la tierra están doblando. El cielo, duro. Y su fondoda un azul iluminadode abajo, al romanticismode los secos campanarios. Faroles, flores, coronas– ¡campanas que están doblando! –...Viento largo, luna grande,

noche de Todos los Santos.

...Yo voy muerto, por la luzagria de las calles; llamocon todo el cuerpo a la vida;quiero que me quieran; habloa todos los que me han hechomudo, y hablo sollozando,roja de amor esta sangredesdeñosa de mis labios. ¡Y quiero ser otro, y quierotener corazón, y brazos

infinitos, y sonrisasinmensas, para los llantosaquellos que dieron lágrimaspor mi culpa!

Juan Ramón Jiménez

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8 La revista que te aleja del cielo.

225 días bajo la hierba y ya me conoces mejor que yo mismo. ellos se han llevado tu sangre, eres un palo seco en una canasta.

¿es así como funciona?

en este cuarto las horas de amor aún hacen sombras cuando te fuiste te llevaste casi todo

me arrodillo en las noches ante tigres que no me dejarán ser. lo que fuiste no volverá a suceder. los tigres me han encontrado y no me importa

Para janeCharles Bukouski

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La revista que te aleja del cielo. 9

Un perro ladra en la tormentay su aullido me alcanza entre

relámpagosy al son de los postigos en la lluvia

yo sé lo que convoca noche adentroesa calmante voz en la casona

tal vez deshabitada

dice sumariamente el desconciertola soledad sin vueltas

un miedo irracional que no se avienea enmudecer en paz

y tanto lo comprendoa oscuras / sin mi sombraincrustado en mi pánico

pobre anfitrión sin huéspedes

que me pongo a ladrar en la tormenta.

TormentaMario Benedetti

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Un domingo en la Central de Abastos. Fotografía; Arturo Rogel.

En la Ciudad de México, en la avenida Javier Rojo Gómez en la delegación Iztapalapa se encuentra la centrar de abastos, sumida entre avenidas y calles llenas de miseria. Inundada de suciedad e inmundicias, cascaras de fruta y verdura podrida, perros vagabundos que han hecho de la central de abastos su casa, se pasean cómodos entre marchantes y comerciantes. Niños, hijos de comerciantes juegan alegres entre la basura. Hermosas frutas y verduras coquetean entre polvo, tierra y una que otra caca.

Es inimaginable que en este lugar tan repulsivo puedan existir pequeñas islas llenas de colorido y formas, inquietantes y cautivadoras para el ojo ávido de encontrar algo interesante dentro de las naves, llenas de penumbra

tristemente alumbradas por focos de 100 y 50 watts, que engalanan mostradores llenos de frutas y carnes de días (no se cuanto pero si de días) con colores chillones que invitan a “chingarse un taquito de chorizo, bistec, cecina o pa no hacerse más pendejo unos campechanos”.

Así a lo largo de los años la central ha proveído a esta enferma ciudad de sanos alimentos llenos de bichos dignos de alguna película post apocalíptica, que nos invita a cuestionarnos:“¿de donde chingados salen las cosas que sirvo en la mesa?”.

Aun con esto, la emoción de entrar a la central de abastos sea de Iztapalapa, Ecatepec o cualquier otra, no es

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comprable a la infértil y soez visita al supermercado, lleno de desinfectantes, lámparas y balastros de luz azul enfermizo y deliciosas manzanas gringas llenas de pesticidas.

Sin duda la central de abastos no es uno de los mejores lugares para estar, pero dan ganas de regresar a probar cuanta madre te ofrecen los locatarios deseosos de que dejes tu dinero con ellos. No hay mejor lugar para comprar la carne para la taquiza en casa para los gorrones de la familia.

Una vez comprendida la compleja división y los diferentes “ghettos” en los que se encuentra dividido ese enorme monstruo lleno de pasillos y naves, es fácil caminar en sus entrañas, después de unos cuantos minutos es posible acostumbrarse a la penumbra reinante, a su ensordecedor murmullo lleno de “pásele marchanta, acá’sta güero, mire na más que calidad”, así y de otras maneras más pintoresca se puede perder el día, salir con los bolsillos vacios por la compra o por el carterista, que también forma parte de la fauna propia de una central de abastos.

Texto; Ramon Peres

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Hell Magazine es una marca la cual no te debes piratear no seas cabron.

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Arturo Rogel nació en México D.F. y aun que radica desde hace varios años en el estado de México se hace llamar Chilango, aunque sabe que en la mayoría de los estados a los que es un asiduo viajero es mal visto, dice que es un gentilicio que no puede más que cantarse y comenta que no podría vivir en otro lugar que no fuera la Ciudad de México, pues sus calles, avenidas y recovecos ocultos lo han cautivado desde niño.

–No era un niño normal, madre me llevaba a caminar por el centro todos los fines de semana junto con hermana, que aun era muy pequeña, así fue la mayor parte de mi niñez, entre calles polvosas y contaminadas, libros, revistas, escaparates y museos; insisto no era un niño normal y padre no deja de reprocharme mi desencanto por el futbol”.

A lo largo de los años encontró que no podía hacer otro cosa que no fuera relacionado con la imagen. Desde niño realizo sus primeros pininos en dibujo, durante su estancia en la secundaria solía fomentar el morbo de sus compañeros con dibujos sugestivos que copiaba con cierto cariño de revistas eróticas para adultos.

-En verdad madre hizo bien en mandarme al psicólogo (entre risas), pues si me gustaba dibujar lo que veía en comics eróticos, los cuales mostraba a mis compañeros de escuela que veían con algún asombro los dibujos que después me robaban; en casa, el sexo nunca fue tabú pero madre no desperdiciaba la oportunidad de esculcar mis cosas en esperanza de encontrar no se qué cosa, pero, por lo general encontraba mis Playboy que iban directo al basurero o a la colección particular de algún pepenador. Así hasta que un día le mostro a padre mis revistas a lo cual le pidió que las dejara en el lugar donde las avía encontrado y que en vez de escandalizarse debería de sentirse tranquila de que no fuera gay.-

No fue Eva, fue la manzana.Mexico, 2009Poquito a poco.

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También fue en la niñez donde conoció una de sus más grandes pasiones, además de la música.

Su primer acercamiento a la fotografía fue con su padre, que le pidió tomar fotos con una cámara K 1000 en una vacaciones familiares. Después de varios años ingreso a estudiar la carrera de fotógrafo laboratorista y de prensa, durante su último año en la escuela preparatoria; al terminar, al mismo tiempo que ingreso a estudiar una licenciatura entro a un taller en la Casa del Lago, con el maestro Lázaro Blanco.

-Padre me pidió tomara una foto de no me acuerdo que, pero lo que si me acuerdo es que le dije que no sabía cómo usar ese armatoste y ahí, en medio de un paraje que no

me acuerdo cual era tome mi primera fotografía, que no sé donde chingados ande. Después de varios años me gustaba ir a la escuela armado con un block de dibujo, lápices, revistas eróticas y una cámara fotográfica de vil plástico Fuji y tomaba fotos de mis compañeras y de cuanta pendejada veia; así hasta que madre compro otra cámara réflex que aun tengo.

Ya en la prepa un amigo me invito a su casa donde conocí a otro sonso que le gustaba tomar fotografías, el cual me invito a participar en una exposición de fotografía, yo dije que si, aunque no entendía que quería decir, pero después comprendí que el quería que yo participara, de hecho el me enseño a ampliar; ya después de esa expo me metí a estudiar fotografía en prepa 2, pues al ser de la UNAM

Quien más.Mexico, 2009

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No llores llorona.Mexico, 2009

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podría tomar clases de fotografía ahí, aunque yo fuera de prepa 3; al poco tiempo entre al taller de fotografía con Lázaro Blanco, aun que lo considero un gran maestro, no estaba desacuerdo con muchas cosas que nos enseñaba, pero lo respeto y le aprendí muchas cosas. Para no hacer el cuento más largo en la carrera también lleve fotografía.

Ya en la universidad dio clases en las asignaturas de fotografía como adjunto, aunque ahora manifiesta un gran rechazo a lo que le enseñaron a lo largo de sus estudios, que con cariño pero con un poco de desprecio llama “su escuela” con la que trata de romper.

-Creo que ya es momento de dejar libre a la imaginación, durante un rato me enfoque a aprender la buena fotografía (haciendo comillas con los dedos), con su encuadre derecho, buena exposición y todas esas madres que funcionaron el siglo pasado para mis maestros; ahora quiero hacer otra cosa; me maravilla navegar por internet y ver un chingo de cosas que ni por la coronilla me pasaron, ver lepes de 16 o 20 años que hacer unas fotos bien cabronas y yo, aun tomando fotos como abuelito, pero creo que poco a poco he ido dejando esos vicios, aun que me cuesta trabajo creo que va saliendo lo que ahora hago y por eso me atrevo a mostrarlo.

Actualmente se desempeña como diseñador en un grupo automotriz, pero no deja de lado sus deseos de trabajar en una revista a lo cual dice saber es difícil, pero su terquedad le impide dejar de intentarlo. – No sé si lo logre, pero no me voy a dar por vencido y aunque no lo logre voy a seguir haciendo fotografía.

Sin más Arturo Rogel explica que trata de hacer algo que aun no puede definir pero tiene un objetivo claro, crecer como fotógrafo y muestra en Hell Magazine su más reciente colección que esperamos sea de su agrado.

Texto; karla Bustos.

No fue Eva, fue la manzana.Mexico, 2009

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20 La revista que te aleja del cielo.

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